Los motores requieren de una afinación cada seis meses (aproximadamente) para mantenerlos en buen estado. En términos generales, la afinación de un auto implica saber un poco de arte y un tanto más de técnica.
Sobre todo porque, además de algunos procedimientos muy estándar de cambios de piezas y líquidos, hay otros de ajuste que dependen, sobre todo, de una buena mano.
En concreto, una afinación consiste en lo siguiente.
• Lavado de inyectores
• Cambio de filtro de gasolina
• Cambio de filtro de aire
• Cambio de Bujías
• Revisión y correccón de tiempo básico de encendido
• Limpíeza de cámara de filtro de aire
Sería bueno, antes de avanzar mas, preguntarnos para que sirve afinar un coche. La respuesta no por obvia deja de ser necesaria: la afinación forma parte del mantenimiento del motor, especialmente de las partes que más rápidamente se desgastan por el uso por que son las que están expuestas a mayor movimiento o mayor suciedad.
Además, se hace porque permite disminuir la cantidad y calidad de gases tóxicos que un motor emite a la atmósfera mientras circula. Finalmente deja el coche a punto para una conducción segura y sin riesgos de fallas mecánicas en el motor.
Por supuesto que para afinar el automóvil es necesario comenzar por levantar el coche y después la tapa del cofre. Hecho esto, es necesario ubicar el carter para quitarle el tapón. El carter se encuentra por lo general en la parte de abajo del motor, es la única tapa (cuadrada) que se puede quitar.
Lo primero que se hará es sustituir algunas piezas que van en ese lugar: el filtro del motor y el filtro de aire. Debes esperar un buen tiempo, una vez que has quitado el filtro de aceite, para que escurra todo el aceite que tiene el coche. Cuando haya terminado, entonces puedes poner aceite nuevo y colocar el nuevo filtro. Para el caso del filtro de aire, el procedimiento es tan sencillo como quitarlo y poner uno nuevo.
Ahí mismo se continua cambiando las bujías y los cables. Es importante que se cambien las cuatro bujías. Hasta aquí todo parece sencillo, pero es en este punto donde se complican las cosas, ya que para continuar debes calibrar las bujías, que en estricto sentido significa abrir o cerrar el ganchito de metal que sobresale del lado de la cerámica. Esta es una parte artística, pues no existe una fórmula para determinar cuál es la dimensión precisa, aunque hay quienes dicen que debe ser del ancho de una segueta. Debes recodar que dependiendo de la apertura de la bujía se modifica la calidad del encendido, y por tanto, el consumo de gasolina en el proceso de arranque del motor.
Calibradas las bujías se sustituyen los cables viejos por los nuevos. Ahí debes tener mucho cuidado en no perder la numeración de los cables, pues de lo contrario te pasarás horas tratando de encontrar cuál es la forma correcta de conectarlos.
Para cambiar el filtro de gasolina es necesario que lo busques en la parte de arriba del motor a un lado de las poleas. Con él no tienes que hacer nada más que quitarlo y sustituirlo por un filtro nuevo.
El lavado de los inyectores de gasolina que hoy utilizan, prácticamente todos los modelos estándar de automóviles es un poco más complicado y requiere de cierto equipo especial.
Finalmente, no queda sino poner a tiempo la máquina. No es tan difícil como parece, para empezar debes detectar la tapa del distribuidor donde van la escobilla, los platinos y el condensador. Poner al punto la máquina significa mover la tapa del distribuidor que es la que fija la velocidad en que se va a encender el coche.